El empleo sigue planchado: nueve de cada 10 firmas no prevé crear nuevos puestos antes de fin de año

Un informe de Trabajo reconoció, por segundo mes consecutivo, que la creación de empleo fue nula en el último año. Destacan que no aceleraron los despidos y suspensiones.

El empleo en el sector privado de la economía no ofrece muestras de recuperación. Hasta el propio Gobierno admitió, por segundo mes consecutivo, que no se crearon puestos de trabajo en el último año y que por lo menos nueve de cada 10 empresas no prevé ampliar sus plantillas de personal en lo que resta del año. En pleno tiempo preelectoral, el único aliciente para la administración kirchnerista es que, en paralelo al parate en la creación de nuevos puestos, tampoco se aceleró el ritmo de despidos y suspensiones, situación que mantiene estable el nivel de empleo. El escenario confirma que, pese a los efectos del deterioro de los indicadores económicos, la inestabilidad cambiaria y la pérdida de rentabilidad, persiste en las empresas la determinación de postergar cualquier decisión en materia laboral por lo menos hasta después del desenlace electoral de octubre.

Las principales conclusiones de la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL), que releva mensualmente el Ministerio de Trabajo, destacaron que durante junio volvió a ratificarse la tendencia de nula creación interanual de empleo en el sector privado que la misma cartera había observado en el informe de mayo. Si bien la EIL detectó que el nivel de empleo registrado privado registró un leve crecimiento (0,1%) respecto a mayo, reconoció que en la comparación con el mismo mes de 2014 «se verifica que en la actualidad se contabiliza la misma cantidad de puestos de trabajo que en junio del año pasado».

En buena medida, ese estancamiento se explica por la determinación de casi 9 de cada 10 empresas de planchar por completo sus planes de contratación de nuevos trabajadores en lo que resta del año. Al respecto, el relevamiento oficial (efectuado sobre un universo de 2400 compañías localizadas en 8 centros urbano del país) indicó que apenas un 8% de las firmas prevé aumentar su dotación de personal en los próximos meses, en tanto que un 88,5% no efectuará cambios y un 3,5% restante estima que reducirá sus actuales plantillas.
Por otra parte, la EIL subrayó que el leve incremento del empleo total verificado en junio respecto a mayo fue resultado del aumento en la creación de puestos en algunas actividades, como construcción (0,3%) y transporte, almacenamiento y comunicaciones (0,3%) y, en menor medida, en la industria manufacturera (0,1%) y en el rubro de servicios comunitarios, sociales y personales (0,1%). En cambio, se profundizó el deterioro del empleo en el sector de servicios financieros y a las empresa, con una caída intermensual del 0,1%, mientras el rubro de comercio, restaurantes y hoteles ratificó los síntomas de estancamiento que evidenció en mayo, ya que no creó nuevos puestos.

Los responsables de la encuesta oficial destacaron que la mínima expansión del empleo relevada se registró en las empresas de mediano porte (0,3%) y en las pequeñas unidades productivas. En las grandes firmas, a su vez, se mantuvo la tendencia de reducción de puestos, con una caída de -0,1%.

Pese a los datos pesimistas sobre una posible recuperación del mercado laboral, la cartera que conduce Carlos Tomada subrayó como elemento alentador que el volumen de los despidos se mantiene en el rango medio del nivel observado en la última década. En junio la proporción de despidos en relación al empleo total alcanzó el 0,7%, registro que –según la EIL– significa que «se ha despedido a algo menos de una persona cada 100 trabajadores ocupados en empresas relevadas por la encuesta».

cronista.com

 

El empleo volvió a caer y la tasa de actividad se redujo hasta su menor nivel desde 2002

Pese a la destrucción de puestos de trabajo, el desempleo se mantuvo en 7,1%, según el Indec. El fenómeno se explica otra vez porque hubo personas que dejaron de buscar ocupación.
La tasa de empleo volvió a caer hasta 41,4% en el primer trimestre del año y la tasa de actividad se redujo hasta su menor nivel desde la crisis de 2002, lo que determinó que en una economía estancada miles de personas salieran del mercado de trabajo, según los datos oficiales del Indec difundidos ayer.

En el primer trimestre del año, la tasa de empleo bajó hasta 41,4% desde el 41,8% registrado un año atrás, por lo que se perdieron 170.678 puestos de trabajo en ese lapso.

Sin embargo, a pesar de la baja en la tasa de empleo, la tasa de desocupación en el primer trimestre se mantuvo en 7,1% al igual que en el primer trimestre de 2014 porque el nivel de actividad disminuyó de 45% a 44,6%.

La tasa de actividad nuclea tanto a las personas desocupadas como a las empleadas. De acuerdo con las cifras del Indec, en el primer trimestre al igual que ocurrió en 2014, la desocupación no aumentó a pesar de la pérdida de puestos de trabajo porque hubo personas que decidieron salir del mercado de trabajo por lo que se conoce como «efecto desaliento».

Sin embargo, economistas especialistas en mercado laboral dudan de la veracidad de los datos del Indec porque en general la baja de la Población Económicamente Activa (PEA) en contextos de caída del empleo se presenta en países de alto ingreso per cápita.

En contextos como el de Argentina, de caída del empleo y baja del salario real, la reacción esperable sería la contraria, con más integrantes del hogar saliendo al mercado laboral e incrementando la oferta.

Otro factor que marcan es que según el Indec la caída de la PEA se da principalmente en los partidos del Gran Buenos Aires (GBA), siendo inexplicable que este fenómeno de «desaliento» pueda verificarse casi exclusivamente en una zona del país.

Así en los partidos del GBA la tasa de actividad mostró una reducción de 1 punto porcentual, de 44,6% a 43,6%, mientras en el promedio de los 31 aglomerados urbanos la baja fue de sólo 0,4 puntos.

En tanto, en el primer trimestre la subocupación se ubicó en 7,6%, medio punto por debajo de la calculada un año atrás cuando fue de 8,1%.

Sobre una población económicamente activa de casi 18 millones de personas, las cifras del Indec revelan que 2.596.000 habitantes tienen problemas de trabajo.

De ese total, 1.254.227 están desocupados y 1.342.553 están subocupados, o sea que trabajan menos de 36 horas semanales y quieren aumentarlas.

Así de acuerdo con las cifras del Indec, la región noreste del país, integrada por Corrientes, Formosa, Resistencia y Posadas, tiene la mejor situación laboral con sólo 2,6% de la población desocupada.

Por el contrario, el peor escenario se vive en la provincia del Buenos Aires, donde 7,9% de la fuerza laboral está sin trabajo, lo que significa un alza de 0,2 puntos porcentuales en la comparación interanual.

En tanto, la región pampeana tiene una desocupación de 7,5%; en el noroeste llega a 6,3%; en la Patagonia alcanza al 5% y en Cuyo al 4,3%.

La división por cantidad de habitantes marca que en los aglomerados urbanos con menos de 500.000 personas, la desocupación afecta al 4,6% y en los que están por encima llega a 7,7%.

Siempre según el organismo oficial, la ciudad con mejor situación laboral sigue siendo Resistencia, con una desocupación de 0,6%, seguida por Formosa (0,9%); Santiago del Estero (1,2%) y Santa Rosa (1,6%).
Por el otro lado, con una tasa de desocupación de 10,3%, Mar del Plata es la más complicada seguida por Rosario (8,8%); Rawson-Trelew (7,9%) y Córdoba (7,9%).

fuente cronista.com

Por Mariana Shaalo

Empleo público K: otra bomba de tiempo para 2016

En una economía estancada y con un déficit fiscal acuciante, el futuro de los trabajadores estatales, tras la mayúscula expansión en la última década, es uno de los lastres que deja Cristina Kirchner a su sucesor. Nombramientos de militantes bajo el paraguas de La Cámpora, sugestivos llamados a concurso y el caso Vanoli en el Banco Central. Anatomía de un Estado elefantiásico.

Como un elefante en un bazar, la mole de 3,4 millones de empleados públicos que creció al calor del kirchnerismo, merodea inquieta por los pasillos del Estado ante un posible cambio de mando después de las elecciones de octubre en la Argentina.

En una economía estancada y con un déficit fiscal acuciante, el futuro de la plantilla de trabajadores estatales, tras la mayúscula expansión que experimentó en la última década, es una de las más delicadas herencias que deja la presidenta Cristina Kirchner a su sucesor.

Además, una ola de sugestivas incorporaciones de familiares y militantes oficialistas en la administración central, justo en el ocaso de la actual gestión, agregan un condimiento político al escenario.

El frente más urgente es el de los más de 600.000 contratados, a quienes a fines de año se les vence el vínculo laboral. Se trata de una cantidad de trabajadores similar a la población de la provincia de Formosa, cuyo destino quedará en manos del próximo Gobierno. Según estimaciones de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), unos 320.000 son empleados provinciales; unos 210.000, municipales; y unos 70.000 dependen de la administración central.

«Una de las cosas que deja el kirchnerismo como deuda es la estabilidad en el empleo público», sostiene Julio Fuentes, secretario general de ATE. Y agrega: «Hay una precariedad enorme, sobre todo en las provincias y municipios, que al final también dependen del financiamiento del Estado nacional».

Según denuncian los trabajadores estatales, la mayoría de estos 600.000 contratados fueron incorporados para realizar tareas transitorias o estacionales pero en la práctica llevan entre dos y 15 años de antiguedad. «Existen muchas formas de contratación de empleo público flexibilizado: ingresan de becarios, por cooperativas o como prestadores de servicios que facturan para terceras entidades que, por lo general, son universidades del conurbano», se quejan desde el Ministerio de Economía, donde habría cerca de 4.000 trabajadores fuera de planta permanente (ver recuadro en pag. 5).

Si bien la ola de contrataciones durante la última década -muchas veces irregulares, otras directamente espúrias, aseguran los expertos consultados- hace que sea casi imposible cuantificar la dimensión exacta de la masa laboral, algunas cifras obtenidas por El Cronista 3Días reflejan el carácter elefantiásico del Estado.

Mientras los trabajadores públicos registrados, es decir, los que figuran en planta permanente, suman 1.722.000 según datos de la Encuesta Permanente de Hogares del Indec, las estimaciones privadas revelan que si se contabilizan los empleados contratados y otros prestadores de servicios, la cifra se duplica. Un trabajo de FIEL de finales de 2014 calculó que el Estado empleaba a 3.440.000 trabajadores.

Entre 1998 y 2014, mientras el empleo privado aumentó un 50%, el público lo hizo en un 85%. Así las cosas, hoy el sector estatal representa el 26% del total del mercado laboral, según un análisis de Abeceb.com. Eso no es todo: si se toma en cuenta, además de los empleados públicos, a los jubilados y a los beneficiarios de planes sociales, la dependencia del Estado alcanza a 15,1 millones de personas. Se trata de un 36% de la población del país. En 2006, esa proporción no superaba el 20%.

«Cuando el empleo privado deja de crecer por falta de inversión y de dinamismo, se genera un aumento de empleos en el sector público», dice Dante Sica, director de la consultora. Y agrega: «Este escenario se ve en la administración nacional pero fundamentalmente se verifica en las provincias y en los municipios».

En el interior del país, la situación es aún más elocuente. Un trabajo de la consultora NOAnomics estima que la dotación de trabajadores provinciales aumentó un 43% entre 2003 y 2014. En el podio se ubican Tierra del Fuego (111%), Catamarca (85%) y Salta (68%). También por arriba de la media se encuentran Chubut (64%), Santa Cruz (62%), Corrientes (56%) y la provincia de Buenos Aires (55%). En total, la planta pública provincial en 2014 fue de 1.997.000 trabajadores. «Es una situación peligrosa porque se trata de mucha gente que puede responder a interes políticos», opina al respecto el economista Jorge Colina, de Idesa. Y agrega: «Hay casos en los que se observa un empleo espurio e improductivo, que se otorga a un militante en lugar de un trabajador capacitado. Eso implica desaprovechar el capital humano disponible».

Refugio

Desde los albores del kirchnerismo, el Gobierno hizo del empleo uno de sus bastiones y hacía allí orientó su política económica. Sin embargo, en los últimos años, la merma en la actividad y la falta de inversión hicieron que la creación de puestos de trabajo privados se desplomara. Fue entonces cuando se echó mano al sector público para dar refugio a cientos de miles de trabajadores.

Según datos de Idesa, aproximadamente 8 de cada 10 de los nuevos empleos generados durante 2014 en los grandes aglomerados urbanos, correspondieron al aparato estatal. «La estrategia de absorber la mayor parte de la fuerza de trabajo en empleos espurios en el Estado e inducir a la inactividad laboral a través de programas asistenciales es insustentable», dice Colina, quien advierte que a medida que «el déficit fiscal se vuelva más insostenible, se impondrá la informalidad como último recurso para subsistir».

Por su parte, Marcelo Capello, titular del Ieral, define a la política de empleo del kirchnerismo como un «keynesianismo asimétrico más bien parecido al populismo», por haber privilegiado el aumento del empleo público tanto en los años económicamente malos como en los buenos. «Se trata de una interpretación de Keynes del kirchnerismo: un keynerismo», ensaya Capello. Y agrega: «Esta estrategia siempre privilegió el sector público por sobre el privado, hasta que el primero terminó ahogando al segundo».

A pesar de tratarse de una prioridad para el modelo K, la caída en el nivel de actividad durante 2014 generó que 2.260.000 personas finalizaran el año con problemas de trabajo, ya sea como desempleados o como subempleados demandantes, especifican en Abeceb.com. Son 266.000 más que en 2013 y el aumento no fue mayor porque hubo un ajuste por precio: el poder adquisitivo de los salarios cayó en 2014 un 4%. «Está claro que la acumulación de errores de política económica del Gobierno y la decisión de no solucionar el problema de la deuda con los holdouts el año pasado estuvo por encima de la prioridad de sostener el empleo», argumentan.

Capas geológicas

El problema del empleo público se suma a la lista de desafíos que deberá enfrentar el próximo Gobierno en materia económica y también social. Fuera de micrófono, los equipos de los principales candidatos al sillón de Rivadavia lo reconocen, pero coinciden en que no sabrán cuántas nuevas capas geológicas heredarán tras una década larga de fuerte protagonismo estatal. «Recién cuando asumamos sabremos con certeza qué nos están dejando», resumen.

Los 3,4 millones de trabajadores estatales representan cerca de un 11% del padrón electoral, con lo cual las promesas de cada candidato pueden ser determinantes de cara a octubre. Al respecto, una encuesta de Cadal encargada a Carlos Fara & Asociados ya indagó en la opinión pública. Ante la pregunta de qué debería hacer el próximo gobierno «con la cantidad considerable de nuevos empleados públicos», un 41% de los consultados sostuvo que se deberían «revistar todas las contrataciones y designaciones». En tanto, un 21% optó por «darle continuidad a los cargos tratando de que cumplan mejor sus funciones en el Estado», y apenas un 11% instó a «recortar masivamente los puestos públicos para reducir el gasto».

«Ahora hay que estar atentos a que no ocurran ingresos extraordinarios de personal al Estado en los últimos meses de gestión del actual Gobierno, comprometiendo adicionalmente a la siguiente administración», señala Capello, del Ieral.

«El próximo Gobierno deberá analizar la situación con detenimiento, hay sectores donde los recursos son escasos como el sanitario, el educativo y el de seguridad. Otros, tal vez estén sobredimensionados», sostiene Sica. Y concluye: «También tendrá que estudiar los contratos existentes: las plantas permanentes no pueden alterarse y en el caso de los contratos temporales, deberá estudiar sus necesidades.»

cronista.com

El empleo, afectado por la fría economía: la industria perdió 24.000 puestos laborales

La caída del número de ocupados en sectores como la industria y algunos servicios, y una pérdida generalizada de poder adquisitivo de los salarios, son algunos rasgos de cómo le fue al mercado laboral en 2014. Otro fue la disparidad entre provincias

La caída del número de ocupados en sectores como la industria y algunos servicios, y una pérdida generalizada de poder adquisitivo de los salarios, son algunos rasgos de cómo le fue al mercado laboral en 2014.

Otro fue la disparidad entre provincias, si se mira por ejemplo el dato de cuánto del efecto de la inflación pudieron compensar los trabajadores.
Las conclusiones surgen de analizar los datos de los asalariados declarados por las empresas en el Sistema Integrado de Jubilaciones y Pensiones (SIPA), según un informe que esta semana difundió el Indec. La estadística muestra que, al cuarto trimestre del año pasado, eran 6.378.782 los trabajadores bajo relación de dependencia, menos que en igual período de 2013.
El comportamiento varió según el sector: en la industria -que ocupa a 18,7% del total de registrados-, se perdieron alrededor de 24.000 puestos, un 2% de los que había en 2013.
Y entre las plantas fabriles, las automotrices estuvieron entre las más afectadas, con una caída de casi 7% (unos 2.300 trabajadores menos que los declarados un año antes).Ese dato desentona con el párrafo del discurso que dio Cristina Kirchner el día 1°de este mes al inaugurar las sesiones legislativas; allí dijo que no se había perdido un solo puesto en esas plantas fabriles.

Lo cierto es que también redujeron dotaciones las empresas de actividades vinculadas, como las de autopartes y carrocerías. Si se suman los tres rubros, las firmas pasaron de casi 78.000 a 72.000 ocupados, entre 2013 y 2014, según La Nación.
El Indec admitió que en 2014 hubo una caída de la actividad industrial de 2,5%, y a eso no le siguió un repunte, según los informes que ya se conocen referidos a los primeros meses de 2015.
En las fábricas también cayó el empleo en las ramas siderúrgica, del plástico y de la indumentaria y, en cambio, creció en sectores como el alimenticio y el petrolero.
En las compañías que están catalogadas como de servicios empresariales e inmobiliarios -en las que trabaja el 12,5% de los ocupados formales- el año pasado terminó con unos 8.100 empleos menos, tras una caída de 1 por ciento. Otra actividad que concentra a buena parte de los formales, el comercio, tuvo una disminución de 0,5% en el número de empleados (cerró con 1.150.021).
La construcción, que se vio afectada por la pérdida de empleos formales en la primera parte del año, registró un repunte en los dos últimos trimestres.
Pese a ese comportamiento en la cantidad de puestos, y siempre según la estadística oficial, no estuvo la construcción entre los sectores que mejor le pelearon a la inflación.
A fines de 2014, el salario neto promedio fue de $ 8.986, un casi 29% superior al de un año atrás, pero unos 10 puntos por debajo de la suba de precios estimada por consultoras privadas y por institutos provinciales de estadística.
En la industria, la brecha con el alza de los precios fue inferior; el ingreso neto, de $ 15.192, resultó 33,5% mayor que la cifra de fines de 2013.
Los salarios registrados tuvieron, en el promedio de todas las actividades, un alza nominal de 35%, unos tres puntos por debajo de la inflación. La evolución no solamente fue despareja según la actividad, sino también según la región del país.
La caída de poder adquisitivo está agravada, para un grupo de empleados, por el incremento del peso del impuesto a las ganancias, medido como porcentaje del salario.

Fuente: iProfesional

Las consultoras y el Gobierno coinciden: se estanca el empleo

La coincidencia es abrumadora: tanto para el Gobierno como para los especialistas del sector privados, la creación de empleo estará prácticamente estancada durante los primeros meses de 2015. Pero el contraste entre el Poder Ejecutivo y los expertos que calculan mediciones alternativas surge cuando se analizan las minúsculas diferencias estadísticas que marcan distintas tendencias de contratación -positiva o negativa- para el mercado de trabajo en un año de elecciones.

Con críticas a los datos privados, el ministro de Trabajo presentó ayer la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) -que hace desde 1996 sobre la base de consultas a 2400 empresas del sector formal- en la que incluye información sobre 2014 y los primeros meses de 2015. De acuerdo con los números oficiales, las expectativas para el primer trimestre de este año muestran un estancamiento en la creación de empleo. Según la cartera que conduce Carlos Tomada, el 87% de las compañías privadas relevadas afirmó que mantendrá intacta su dotación de personal. Por otro lado, la encuesta agregó que un 9% de las firmas la aumentará, mientras que un 4% la disminuirá.

La expectativa neta de creación de empleo oficial es positiva en 4,9 puntos porcentuales para el primer trimestre de 2015. Los buenos resultados se repiten en los cortes que hace la EIL por tamaño de empresa e industrias.

«Las expectativas netas positivas respecto del empleo son similares a las de los cuartos trimestres de 2011, 2012 y 2013, y mucho mejores que las opiniones de fines de 2008, cuando se inició esta crisis global que aún repercute en el mundo», señaló el informe oficial.

Sin embargo, en diciembre Manpower dio cuenta del impacto de la actual coyuntura económica. En su último informe de expectativas para la Argentina, la consultora internacional anticipó que su pronóstico para el primer trimestre de este año era el peor desde 2009.

«Los empleadores reportan en el país intenciones de contratación modestas para el próximo trimestre», previó. Según Manpower, un 9% de los empleadores anticipa un incremento de sus dotaciones, un 6% pronostica un descenso y un 82% no prevé cambios. Los números parecen similares a los oficiales, pero los producidos por el Ministerio de Trabajo muestran estabilidad en el tiempo a diferencia de los de Manpower, cuyas series anticipan un desaceleración pronunciada en el mercado laboral.

Sin embargo, fue SEL Consultores la que dio el pronóstico más pesimista. Según los números de su encuesta dinámica, en el mercado laboral sólo 11% de las compañías prevé incrementar su dotación en 2015, mientras que un 18% achicará su staff. Es una diferencia negativa neta de ocho puntos.

Justamente, por ese diagnóstico el Ministerio de Trabajo cargó contra SEL en su informe. Allí se la acusa de expandir su pronóstico sobre 150 empresas líderes del país a todo el mercado laboral.

Irónicamente uno de los fundadores de SEL Consultores, Ernesto Kritz, fue quien a fines de los 90 asesoró al Ministerio de Trabajo en la elaboración de la EIL y armó los cuestionarios de la encuesta. «El EIL siempre fue un buen indicador y un lindo proyecto», dijeron cerca del economista ya fallecido.

En Trabajo, afirman que el EIL es más representativo que la encuesta de SEL. No obstante, especialistas dicen que la mayor base del EIL no debería modificar las tendencias finales, sino, en todo caso, amplificar las opciones de apertura. «Hoy en día, hay que dudar de todos los números del Gobierno y la EIL viene dando siempre igual a pesar del contexto», analizó la fuente.

«La última vez que tuvieron un número de expectativas tan altas fue en abril pasado», criticó Nuria Susmel, especialista de FIEL. «Hubo destrucción de empleo en 2014. Nuestro escenario para 2015 es, dado el nivel de actividad, de más caída de empleo», pronosticó.

«Sin aumento de la actividad económica, lo más probable es que el empleo privado registrado se mantenga estático y hasta es posible que caiga algo», coincidió Jorge Colina, economista de Idesa.

87%

Estancamiento

Es la proporción de empresas que no modificarán sus plantillas en el primer trimestre de este año, según el Gobierno.

Fuente: La Nación

Capitanich afirmó que «no hay destrucción de empleo en la Argentina»

El jefe de Gabinete vaticinó además una «muy buena expectativa en los índices económicos para 2015» después de una importante recuperación del movimiento económico en el último trimestre de este año.

No obstante, al hacer un balance del año que termina, Capitanich reconoció que los meses de julio, agosto y septiembre «no fueron meses positivos para la economía».

«Nosotros tenemos muy buena proyección para los índices económicos para el año 2015, después de haber detectado un importante recuperación del movimiento económico en el último trimestre de este año», destacó en su habitual conferencia de prensa en la Casa de Gobierno.

«Respecto al tema del índice de precios al consumidor, la proyección que tiene el presupuesto del 2015 es equivalente al 15,6 por ciento y las tendencias son muy auspiciosas para el año próximo», señaló.

En esa línea, enumeró que 2015 será un un año «auspicioso porque partimos de un 3,7 por ciento del indice de precios al consumidor en enero y en noviembre el mismo índice arrojó un 1,1 por ciento».

«Todas las consultoras privadas, inclusive aquellas que nosotros no reconocemos como una metodología solida y sustentable, han observado claramente una desaceleración a nivel de precios y estabilidad en los mismos. Inclusive para un mes que estacionalmente tiende a ser elevado como es diciembre», explicó.

En tanto, al hacer un balance del año económico, Capitanich precisó que «en los meses julio-agosto e inclusive septiembre no fueron meses positivos para la economía del país, pero empezamos a observar un comportamiento positivo de la economía en muchos rubros a partir de octubre, noviembre y diciembre».

Dio como ejemplo «la industria de la construcción, donde se observa claramente en octubre un incremento superior al 2,3 por ciento, más de 400 mil empleos», y destacó que «las políticas públicas dan resultados» ya que «este año la inversión pública en materia de construcción de viviendas alcanza los 15.500 millones de pesos estimativamente y en 2015 habrá 30.500 millones de pesos de inversión en este sector».

El funcionario subrayó que «este año tenemos 134.000 viviendas del Programa PROCREAR y esto tendrá una aceleración muy profunda a partir de 2015».

«Estos logros alcanzados en materia económica y social no es obra de la casualidad, es obra de la causalidad. Es decir los estímulos que se aplican desde el gobierno nacional a la demanda agregada propiciada por las políticas públicas del gobierno nacional», enfatizó.

Por otra parte y en materia de precios, señaló que “observamos que el horizonte, por la estabilidad del precio del combustible y aún la reducción del 5 por ciento, la estabilidad del tipo de cambio y la expansión de la recaudación” permite observar con “optimismo” los próximos meses en cuanto a “confianza del consumidor, compensación de niveles de actividad y estabilidad de precios” .

En ese marco, Capitanich destacó que en el 2014 “no hubo ninguna destrucción de empleo”, como indicaron algunos diarios porteños, y que las «desvinculaciones laborales fueron este año inferiores a las de los últimos siete años”.
TELAM

2014: El año del ajuste Cristinista

El mejor regalo que nos podría hacer Cristina sería devolvernos el país que recibió en el 2007. El país tenía un montón de problemas por resolver pero generaba empleo, acumulaba divisas y atraía inversiones. La Argentina modelo 2014 tiene problemas mas graves que en el 2007 pero ahora destruye empleo, no genera divisas y no atrae inversiones.

Nunca antes un gobierno se vio forzado a pagar las consecuencias de sus propios actos como le está sucediendo a Cristina.

En términos del desempeño económico de nuestro país, empezamos a asistir a un fenómeno interesante desde el punto de vista histórico. Nunca antes un gobierno se vio forzado a pagar las consecuencias de sus propios actos de la manera que le está sucediendo a Cristina Kirchner. Hasta ahora un gobierno implementaba distintas políticas públicas pero las principales consecuencias de mediano y largo plazo las terminaba afrontando otro gobierno.

Pasó con Perón, con Alfonsín, con Menem, con Duhalde. Dejo fuera del análisis a aquellos gobiernos que fueron interrumpidos por golpes de estado y a los gobiernos no elegidos democráticamente.

Cristina está enfrentando las consecuencias de haber postergado decisiones que, estando en condiciones de hacerlo, no quiso tomar Néstor Kirchner al final de su mandato ni quiso tomar Cristina durante su primer mandato.

En economía no existen las cenas gratis, siempre los costos los paga alguien. Y cuando los costos superan a los beneficios, la realidad se impone por su propio peso.

Se me viene a la mente una reflexión que hizo alguna vez Leopoldo Portnoy mientras él era decano de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA y yo un simple estudiante. En ese momento se discutía si la Licenciatura en Economía debía cursarse en la Facultad de Ciencias Económicas o en la Facultad de Ciencias Sociales. Portnoy, un poco en broma y otro poco en serio, dijo algo más o menos así: en realidad Economía no debía estudiarse en ninguna de esas dos facultades, debía estudiarse en Ciencias Exactas, porque más tarde o más temprano la economía SIEMPRE ajusta. Por ajuste, él no se refería a un programa de ajuste monetario o fiscal como hoy los conocemos, sino que se refería a que la economía siempre terminaba corrigiendo sus desequilibrios. Era una época en la cual todavía la palabra “ajuste” no tenía la connotación social que hoy le damos.

Sobran buenos ejemplos nacionales e internacionales de correcciones ordenadas de desequilibrios macroeconómicos, pero también sobran malos ejemplos de correcciones hechas a los tumbos. La principal diferencia entre una corrección bien hecha y una mal hecha, es que cuando las correcciones se imponen por sobre el deseo del gobierno los que más sufren son los que menos ingreso tienen. Son los sectores de menores recursos los que más se ven afectados por las decisiones que un gobierno no quiere tomar.

¿Cómo los afecta? Pérdida de poder adquisitivo real de la moneda (inflación) y caída del nivel de empleo como consecuencia de la caída del nivel de actividad industrial y comercial.

Nuestra economía esta corrigiendo a los golpes y a los tumbos los desequilibrios que el gobierno no quiere corregir y que inútilmente pretende ocultar.

El Cristinismo ya sabe que no puede evitar el ajuste, porque ya esta afectando a toda la economía, sólo trata que las culpas sean de “los otros” o al menos que sean compartidas.

Durante 2014 bajó el nivel de actividad comercial como lo vemos todos los días en nuestros barrios al ver la cantidad de locales que se cierran. Bajó el nivel de actividad industrial como lo vemos reflejado en los despidos, suspensiones o cierres de turnos o fábricas. Bajaron las exportaciones por falta de competitividad. Bajaron las importaciones por falta de divisas. La lista es larga y muchos de los efectos antes citados se vinculan entre sí.

El caso más básico para analizar la conducta del gobierno es la inflación. El gobierno inútilmente intenta echar la culpa de la pérdida del valor del peso a las “corporaciones”. El gobierno es el monopolista, es decir único oferente, de los pesos. Si sobran pesos en la economía, ¿es culpa de las empresas? ¿Quién decide el nivel de oferta de pesos? ¿Las corporaciones o el gobierno? ¿Cuando alguien deja de demandar pesos, lo hace porque desconfía de las corporaciones o del gobierno que respalda esa moneda? Las respuestas a esto son tan obvias como inútiles los esfuerzos del gobierno para confundirnos. Ahora bien, justo es reconocerles que son perseverantes.

Miremos un ejemplo numérico para evaluar la ridiculez del argumento oficial. El gobierno quiere que en el mismo momento creamos dos cosas: 1) Qué la inflación 2104 fue del orden del 25% y 2) Qué la culpa de esa inflación fue de las “corporaciones”.

Supongamos que ambas cuestiones fueran ciertas. YPF, la corporación mas grande del país luego del propio Estado y que conduce políticamente la Presidenta desde 2012 aumentó el precio de los combustibles mas que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del INDEC durante 2012, 2013 y 2014. Sólo este último año aumentó los combustibles un 40%.

Se supone que el impacto de la “maldad” de las corporaciones de aumentar los precios es “bien medido” por el gobierno en el IPC. La “medida oficial” de esa maldad nos da en 2014 aproximadamente 25%. YPF conducida por Cristina aumentó los combustibles mas del 40%. ¿Cristina Kirchner está al frente de las “malvadas” corporaciones que atentan contra los argentinos? Piadoso silencio revolucionario.

Todo ello sin dejar de mencionar que la propia Presidenta en su momento dijo que si la inflación llegara al 25% todo volaría por el aire. Menos mal que Cristina no tuvo razón. Años más tarde el gobierno festeja que según los datos oficiales la inflación 2014 es del 25%. Es decir, espera que festejemos que en un año “sólo” nos quitó el 25% del poder adquisitivo de la moneda. Y eso si las cifras del Indec fueran las reales.

El mejor regalo que nos podría hacer Cristina sería devolvernos el país que recibió en el 2007. El país tenía un montón de problemas por resolver pero generaba empleo, acumulaba divisas y atraía inversiones. La Argentina modelo 2014 tiene problemas mas graves que en el 2007 pero ahora destruye empleo, no genera divisas y no atrae inversiones.

Salud Cristina, vos lo lograste.

Por Cristian Folgar
lapoliticaonline.com

Para Tomada, el empleo está «estable»…

El ministro de Trabajo minimizó la baja en el indicador económico y aseguró que el gobierno seguirá «defendiendo los puestos de trabajo».
El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, aseguró que «la situación del empleo es estable» y que el Gobierno seguirá «en un proceso de defensa y mantenimiento de los puestos de trabajo».

«La estructura ocupacional en estos momentos en la Argentina es estable. La tasa de desocupación en los últimos cinco años ha oscilado entre 6.8 y 7.5. Esa es la única oscilación que ha habido en todos estos años», evaluó. Ante eso, Tomada dijo que «la respuesta por parte del Gobierno Nacional es siempre defender el empleo, de generar políticas contracíclicas en situaciones donde puede haber afectación del empleo».

«Es algo que siempre nos ocupa y en lo que venimos trabajando», sostuvo el ministro en declaraciones a Radio Del Plata. «En términos de la situación de empleo en el mundo hay una importante afectación. Y la Argentina que podría estar más afectada, ha podido tapiar mucho mejor esa situación precisamente por las políticas que viene desarrollando de fomento al empleo y estímulo a la actividad», concluyó.

NA

Comienza a funcionar el registro de empresas sancionadas por fraude laboral

Se trata de una base de datos de acceso público. Estará habilitado desde la primera semana de octubre una vez que se publique el decreto reglamentario de la ley 26940 que establece nuevas herramientas en el combate contra el empleo no registrado.

El Registro Público de Empleadores con Sanciones Laborales (Repsal), una base de datos de acceso público en el que figurarán aquellas empresas que incurran en delitos de fraude laboral, comenzará a funcionar desde la primera semana de octubre una vez que se publique el decreto reglamentario de la ley 26940 que establece nuevas herramientas en el combate contra el empleo no registrado.

El nuevo registro incorporará a los empleadores que no blanqueen a sus trabajadores, que contraten menores o incurran en la trata de personas para el trabajo forzado, los que sufrirán sanciones que irán desde la anulación de subsidios y contratos con el Estado hasta la limitación para el acceso a créditos de instituciones bancarias públicas. Además, en los casos de reincidencia las empresas perderán el acceso a todo tipo de beneficios de carácter impositivo.
La creación del Repsal fue impulsada por el Gobierno con el propósito de reducir los niveles de informalidad en aquellas empresas que tienen parte de su personal en blanco y, según las autoridades, poseen la capacidad contributiva suficiente para formalizar al resto de sus trabajadores. De acuerdo con los datos relevados por el Ministerio de Trabajo, por lo menos un tercio del empleo no registrado corresponde justamente a empleadores que mantienen parte de su personal en condición informal, hecho que produce situaciones de competencia desleal.

Además del nuevo registro, la ley de Promoción del Trabajo Registrado y Prevención del Fraude Laboral prevé la implementación de una amplia rebaja de las contribuciones patronales (SIPA, Pami, Fondo Nacional de Empleo, Régimen Nacional de Asignaciones Familiares y Renatea) para aquellas compañías que registren trabajadores informales o contraten nuevo personal. Los beneficios están determinados por el tamaño de las firmas, y favorecerán en mayor medida a las microempresas de hasta 5 trabajadores que quedarán exceptuadas en forma permanente del pago del 50% de las cargas patronales cuando registren un empleado y siempre que no produzcan bajas en su plantel, no sean sociedades anónimas y no superen un nivel de facturación de $ 2,4 millones anuales. También esos empleadores recibirán como auxilio adicional un límite en las cuotas que cobran las ART.

El Cronista

Empresarios temen que el default deje aislado al país

“Argentina se encerró y perdimos mercados”, dijo Pagani, de Arcor. Rocca, de Techint, pide que haya mayor certidumbre La retracción en las ventas impacta en el nivel de operaciones de las diferentes empresas.

Empresarios argentinos expresaron preocupación ante la posibilidad de que el país pueda quedar aislado por el default y pidieron mayor certidumbre en la economía local.

Directivos de las principales empresas del país analizaron la situación económica y el futuro de sus inversiones en una serie de entrevistas que publicó ayer el diario Clarín, con muchas coincidencias.

El presidente de la Organización Techint, Paolo Rocca, señaló que la caída en las ventas de varios clientes de los sectores industriales, como automotriz, línea blanca y construcción, está impactando en el nivel de operaciones de Ternium Siderar y en las actividades del área de construcciones.

Para mejorar la situación, remarcó que deben recrearse las condiciones para otorgar mayores niveles de certidumbre a la economía local, corrigiendo desequilibrios macroeconómicos y aliviando la presión tributaria”.

“Esto permitirá generar un ciclo positivo de inversiones privadas que, sin duda, puede dinamizar los mercados en los cuales estamos presentes y donde la Argentina tiene ventajas competitivas”, añadió.

A su vez, el presidente del grupo alimenticio Arcor, Luis Pagani, advirtió que “Argentina se encerró y perdimos mercados por no seguir las negociaciones. También me preocupa la calidad de la educación”. Pagani remarcó que a los empresarios les preocupa más la inflación y la caída del consumo y detalló que “cualquier obra que se pretenda hacer empieza con un presupuesto y termina saliendo el doble”. Respecto al conflicto con los holdouts que litigan en Nueva York el pago de los bonos de deuda que adquirieron, agregó: “es un tema importante. Tenemos previsto inversiones por 150 millones de dólares. A las empresas con necesidad de financiamiento, eso nos complica y es un tema preocupante”, acotó.

Por su parte, Cristiano Ratazzi, presidente del grupo Fiat Argentina, señaló que si bien la situación económica actual “no es culpa” del ministro de Economía, Axel Kicillof, “la barbaridad que hicieron en 2002 nos va a llevar veinte años recuperar”. Ratazzi cuestionó anoche en el show de Mirtha Legrand, por Canal 13, las disposiciones económicas que tomó la presidencia del peronista Eduardo Duhalde como “la cancelación de contratos y la pesificación asimétrica” y lamentó que después, con la llegada del kirchnerismo, “es una lástima que no lo fueron corrigiendo de 2003 a 2007”.

Sobre el panorama actual de la economía, dijo que “no está nada bien” y acotó: “qué le vamos a hacer, no lo corregís en diez días”. Consultado sobre si la del kirchnerismo fue la década ganada, Ratazzi fue tajante y dijo: “absolutamente, no”.

Asimismo, señaló que al reencontrarse con la presidenta Cristina Fernández la notó “más contemporizadora en el trato con la gente” y destacó su estima por Kicillof porque, dijo, “es intelectualmente honesto, tiene capacidad y preparación”.

Por otra parte, unas 30 asociaciones empresarias reiteraron ayer su rechazo total al proyecto de Ley de Abastecimiento que impulsa el Gobierno y será tratado por el Senado el miércoles.

Las agrupaciones, entre ellas la Asociación Empresaria Argentina (AEA), la Sociedad Rural (SRA) y la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA) consideraron al proyecto como “un grave avasallamiento al ámbito de decisión propio de las empresas privadas y es claramente inconstitucional”.

“Afecta el derecho de propiedad y a ejercer toda industria lícita’ garantizados por nuestra Constitución, generando un fuerte disuasivo a la actividad empresaria, las inversiones productivas y el empleo”, añadieron. “(El proyecto) atribuye al Ejecutivo el derecho de intervenir desmesurada y discrecionalmente en la actividad y las decisiones de las empresas establecidas en el territorio nacional, lo cual implica un drástico cambio en el régimen económico de la Argentina consagrado en nuestra Constitución”, ampliaron.

Las asociaciones agregaron que “la experiencia histórica internacional ha demostrado que la prosperidad económica y la eliminación de la pobreza se han alcanzado en aquellos países donde el Estado no interviene en las empresas privadas”. (DyN-Télam)

Cayeron 400 mill empleos en seis meses

Según datos oficiales del INDEC la masiva baja fue durante el primer semestre del año. A partir del segundo se perdieron 127 puestos de trabajo por hora.

La crisis industrial trae aparejada un grave problema en el mercado laboral. Se cierran las oportunidades laborales. En los primeros seis meses del año cayeron 400 mil puestos de trabajo. Además por hora caen 127 empleos en la Argentina, según el Indec.

El deterioro de los indicadores laborales no es nuevo, pero se profundizó en el último año, y escaló en semanas atrás cuando, en plena recesión y con un crecimiento incesante de la tasa de inflación, la Argentina entró en default por el conflicto con los holdouts.

Y ya hasta el propio Gobierno no lo oculta. Los datos de la Encuesta Permanente de Hogares reveló que en 12 meses, hubo 554.800 puestos de trabajo perdidos o cesanteados, sin considerar los afectados por suspensiones parciales con pago acotado de salarios.

Los números fueron más dramáticos en lo correspondiente al segundo trimestre respecto de los tres meses previos, 273.700 personas debieron quedarse en sus casas por haber perdido el empleo, no sólo porque proporcionalmente la cantidad de afectados fue singularmente más significativa, sino porque sucedió en un período estacionalmente aumenta la capacidad de generación de riqueza, la producción y el comercio, y además ese cuadro se dio antes de que empeorara el escenario financiero, porque el Gobierno decidió vivir con lo nuestro y prescindir del mundo.

En tanto, si se analizan los primeros seis meses del año, el parate económico destruyó 404 mil puestos de trabajo. Hace tres años, la desocupación estaba en 7,2% y la tasa de actividad de 46,3%. En el primer semestre de 2014 esos porcentajes, en promedio, fueron de 7,3% y 45,6%. De acuerdo a la estimación de Idesa, si la tasa de actividad fuese la misma de 2011, el desempleo hubiera sido 8,7%, o sea 1,4 puntos superior, publica el diario El Cronista.

Y añade que la tasa de actividad del segundo trimestre fue de 44,8%, la más baja desde el año 2003 inclusive. La de empleo es de 41,4%, la menor desde 2006.
mdzol.com

En tres meses se cerraron más de 300 mil cuentas sueldo

Ocurrió entre diciembre de 2013 y marzo de este año. El dato refleja la perdida de empleo y la creciente precarización laboral.
Aunque la contracción del mercado laboral es percibida en las mediciones oficiales, algunos datos muestran un cuadro más preocupante que el que advierte el Indec. A la creciente conflictividad social, se suman otros datos duros. De acuerdo al Banco Central, se perdieron más de 300.000 cuentas sueldo en sólo tres meses.

De acuerdo al ente monetario, entre diciembre de 2013 y marzo de este año, el número de cuentas se redujo de 8.029.168 a 7.771.422, lo que marca una pérdida de 311.746 unidades.

Si bien existe un elemento estacional, debido a que durante el verano se crean muchos empleos temporales que se cierran sobre el fin de la temporada, la caída es mucho más pronunciada que la registrada en los últimos años.

Si a este dato le anexamos el creciente número de conflictos laborales que tienen como principal motor la defensa de los puestos de trabajo, la merma de cuentas evidencia, sin dudas, una contracción del mercado laboral: tanto por la pérdida de puestos de trabajo como el desplazamiento de trabajadores en blanco que pasan a engrosar los porcentajes de empleo informal.

En los próximos días, el BCRA dará a conocer los datos del segundo trimestre, lo que permitirá medir esta tendencia y, ya sin el efecto del empleo de verano, analizar su impacto real sobre el mercado laboral.
argnoticias.com

Exportadores anticipan una “parálisis”

La Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC) expresaron ayer su rechazo al proyectos de ley de abastecimiento que impulsa el Gobierno por entender que “la mayor intervención estatal ocasionaría nula inversión, posible desinversión, menor producción, desempleo y eventual parálisis del comercio agroexportador”.

En un comunicado conjunto, ambas entidades, cuyos miembros canalizaron en 2013 el 37% de los ingresos por exportaciones del país, manifestaron que la iniciativa oficial, “sin perjuicio de la violación de varios artículos de la Constitución Nacional, provocaría, si se aprueba, un grave impacto negativo en los consumidores y el nivel de empleo, al afectar también los niveles de producción de la economía en general”.
“

La incursión directa de funcionarios del Estado en la administración de bienes y medios de producción privados, que según indica la experiencia provoca males mayores a los que pretende corregir”, señalo el documento elaborado por Ciara y CEC.
diariohoy.net

El Gobierno reconoce que se estancó la creación de empleo

Según los datos del ministerio de Trabajo también el número de suspensiones sube.

El relevamiento trimestral difundido por el ministerio de Trabajo sobre los sectores registrados reveló una drástica caída de las tasas de entrada, mientras las cesantías alcanzó su mayor nivel desde la crisis económica del 2009.

El ministerio de Trabajo, que conduce Carlos Tomada publicó la última actualización de la Encuesta de Indicadores Laborales, en base al segundo trimestre del año. De allí se desprende indicadores preocupantes.

Entre abril y mayo, el índice de empleo quedó en 134,5 puntos, apenas 0,5% más que hace un año, aunque cayó 0,3% en el segundo semestre del año y confirmó así once trimestres de parálisis. En tanto, la tasa de suspensiones en las empresas pegó su salto más importante desde la crisis económica del año 2009.

La industria manufacturera se mantuvo inmóvil con un avance del 0,4% y la construcción mostró una baja de 4,6% y consolidó diez trimestres de caídas consecutivas y su menor nivel de empleo en nueve años. El informe del ministerio de Trabajo concluye que para el tercer trimestre de las empresas que proyecta concurrir al merado para hacer movimientos de personal (alrededor de 30%), sólo 59% tenía expectativas de ampliar la dotación, esto es menos de una de cada cinco, en comparación con casi 70% que manifestaba un año atrás.

Las suspensiones es otro de los puntos preocupantes del informe (mide cada 1.000 trabajadores) y refleja un incremento de 5,8 en el segundo trimestre, casi dos puntos por arriba del primero, que cerró en 3,7. El Gobierno ha negado continuamente este dato preocupante en el sector automotriz, con el argumento de que la problemática se debía a la relación comercial con Brasil. El pico máximo de suspensiones fue en 2009.

LOS MAS AFECTADOS

Los sectores que sufren la tendencia son la industria, el comercio, restaurantes y hoteles, transporte, almacenaje y comunicaciones, y servicios financieros. La construcción, que había reflejado una recuperación durante el anterior trimestre, también tuvo un 4% negativo. La cartera laboral realiza este relevamiento en ocho de los centros urbanos más grandes de todo el país
quilmespresente.com

Si estás sin empleo, cómo acceder al nuevo beneficio de hasta 2700 pesos

La presidente Cristina Kirchner anunció este jueves una nueva iniciativa destinada a promover el trabajo entre los jóvenes: Proemplear. ¿Cómo funcionará el programa?.

Por cadena nacional, Cristina Kirchner brindó algunos detalles sobre el funcionamiento de este nuevo plan que apunta a optimizar instrumentos económicos para proteger los puestos de trabajo y, a la vez, promoverlos, en momentos en que la economía argentina sufre una recesión.

Consciente de esta coyuntura, a través del programa Proemplear, la mandataria destacó la importancia de dar «respuesta a los desafíos del contexto laboral, para proteger puestos de trabajo, promover el empleo registrado y facilitar la inserción laboral». ¿En qué consiste este nuevo plan?

– Se trata de una programa que se articula con el plan Progresar, en el que se asiste a jóvenes en condiciones de vulnerabilidad y adultos desempleados con 600 pesos por mes.

– Si esos jóvenes, ingresan a trabajar a una fábrica, ese beneficio se llevará a 2.000 pesos por el término de 6 meses para promover la inserción laboral.

– Pasado ese periodo, si la fábrica decide emplear a ese joven de forma definitiva el aporte del Estado se elevará a 2.700 pesos para completar el sueldo básico del convenio y tendrá una duración del beneficio entre 6 y 12 meses, de acuerdo a cada industria.

La mandataria anunció también modificaciones para el Programa de Recuperación Productiva (REPRO), con un aumento que permitirá pasar de 1500 a 2000 pesos en la suma no remunerativa que se otorga por empleado en empresas en situación de crisis.

Además del aumento de la cifra otorgada, se extenderá a 12 meses el plazo de entrega del dinero a las empresas.

Cristina aseguró que estas modificaciones son «una respuesta para los desafíos del contexto laboral actual: promover puestos de trabajo, proteger y promover inserción».

Resaltó que «es para motivar a los jóvenes a estudiar y trabajar y a los empresarios a tomar a los jóvenes». porque «un joven que estudia y está entrenado en el lugar en que trabaja cuatriplica sus posibilidades de inserción laboral».

El programa, añadió Cristina, «abarca a 815 mil trabajadores, pero a más de 300 mil empresas: las beneficiarias son PYMES».

La presidente además anunció otros programas destinados a promover la producción, incentivar el consumo, proteger el empleo, evitar el desempleo, dinamizar el mercado inmobiliario y mejorar el servicio del transporte publico de pasajeros de corta distancia.
minutouno.com

Recesión: crece el temor a perder el empleo

El miedo a quedar sin trabajo subió dos puntos durante el año pasado, del 24,1 al 26,1% de la población en condiciones de trabajar, según un informe del Observatorio de la Deuda Social de la UCA

De acuerdo al relevamiento de los investigadores de la casa de altos estudios, el temor entre los asalariados creció a causa de la desaceleración económica y el estancamiento del empleo que afecta al país.

Y como los datos reflejan la percepción de la gente en 2013, los analistas creen que el porcentaje por estos días es mayor debido a que la desaceleración de la actividad, agravada por la caída del consumo y de la inversión, se transformaron en recesión. Además, en este contexto, se acrecentaron los recortes de horas extras y las suspensiones mientras en varios sectores, como la industria automotriz y la construcción, hubo pérdida de puestos de trabajo.

El Informe de la UCA señala que «las mujeres, los jóvenes y los trabajadores con secundario incompleto presentan una situación laboral más inestable». A su vez, a la hora de analizar la posibilidad de que los jóvenes se inserten en un «empleo pleno de derechos es 20% menor a la de los adultos».

«Los jóvenes tienen el triple de posibilidades encontrarse desocupados en comparación con los adultos», alerta el sondeo a la vez que pone el foco en «el nivel educativo» porque «marca las diferencias más profundas».

Según el estudio, alcanzar el pleno empleo en trabajadores que no completaron el secundario «es la mitad de la que se registran entre quienes sí lo completaron». Y nuevamente tienen mayores chances (50% aproximadamente) de riesgo de desempleo quienes no poseen secundario completo.

El Informe de la UCA también indica que la precarización laboral que se produce en mayor medida en las actividades informales y entre los trabajadores de menor calificación, como sucede en la construcción.
diariohoy.net

Planta autopartista se instalará en Luján y creará más de 400 puestos de trabajo

La empresa Master Trim de Argentina (MTA), perteneciente a Toyota, construirá una nueva sede en el Parque Industrial de Villa Flandria, partido de Luján.
La empresa Master Trim de Argentina (MTA), perteneciente a Toyota, construirá una nueva planta en el Parque Industrial de Villa Flandria, partido de Luján, lo que creará más de 400 puestos nuevos de trabajo.

El director provincial de Desarrollo y Promoción Industrial, Fabricio De Arriba Arévalo, celebró que la empresa, que fabrica fundas para interiores de vehículos, “apuesta a nuestro país, a invertir en nuestra Provincia y eso significa apostar a nuevos empleos e ingresos de recursos”.

Por su parte, ejecutivos de la compañía Toyota Boshoku ya adelantaron a las autoridades del municipio, la provincia y la Nación que realizarán un plan de inversiones que superará los 33 millones de dólares a tres años y permitirá generar cerca de 400 empleos directos.

“La empresa acompaña a una de las políticas públicas que está llevando adelante el Gobernador (Daniel Scioli) que son la creación de los parques industriales, y en especial el de Villa Flandria donde hay que destacar la magnífica labor del gerente general de Vínculos Interinstitucionales de ARBA, Ariel Notta”, agregó De Arriba Arévalo en declaraciones a BA Noticias.

La planta comenzará a producir entre agosto-septiembre de 2015 y su puesta en marcha sustituirá importaciones por 24 millones de dólares anuales.

Además, los directivos manifestaron su intención de comercializar estos productos con otras terminales.

Toyota Argentina anunció también que continuarán con una próxima inversión por 19,2 millones de dólares y la creación de 100 nuevos puestos de trabajo en materia de producción y desarrollo.
lavoz.com.ar

Axel Kicillof defendió ante el G-20 «las políticas expansivas con inclusión social»

En la segunda jornada de actividad en Washington, el ministro de Economía planteó ante sus pares y presidentes de bancos centrales de las naciones más desarrolladas la necesidad de actuar activamente para disminuir la desigualdad social y generar empleos.
«La debilidad de la demanda agregada está dañando la recuperación. Evidentemente, la austeridad no es el camino para el crecimiento. No podemos enfrentar la crisis aplicando las mismas políticas que condujeron a ella», enfatizó el ministro frente a sus pares en el G20.

Sin mencionar que la Argentina ingresó en un escenario recesivo, con aceleración de la inflación, estancamiento del empleo privado y creciente déficit fiscal, Kicillof dijo que la «Argentina apoyó el compromiso del G20 de incrementar el alcance de las políticas económicas para lograr un crecimiento fuerte, balanceado y sostenible», según informó el Ministerio en un breve parte de prensa.

«Desde nuestra perspectiva», dijo el ministro, «las políticas activas que promueven la inclusión social son el instrumento más efectivo para impulsar la demanda agregada y, de esta forma, fortalecer el crecimiento global».

Inquietud por los holdouts

Kicillof concluyó su discurso en el G20 con una referencia al conflicto con los bonistas que no ingresaron al canje de deuda en default, resaltando el «proceso exitoso de reestructuración de la deuda» que llevó a cabo la Argentina en los últimos años y señalando las implicancias sistémicas de este caso: «Si prevalecen sus conductas predatorias, los holdouts se asegurarían una herramienta que transformaría a los procesos de reestructuración de deuda en virtualmente imposibles, con efectos negativos para la estabilidad y predictibilidad financiera global», aseveró el ministro.

Kicillof alertó por las «políticas depredatorias de los holdouts»

Luego enfatizó que la experiencia argentina demuestra que «no hay crecimiento si la carga de la deuda es excesiva, y, al mismo tiempo, la deuda no puede ser pagada si el crecimiento no es sostenible».

Cabe destacar que los últimos datos de 2013 de la Secretaría de Finanzas de la Nación, correspondiente a septiembre, dieron cuenta de que la deuda pública de la Argentina creció más de 7,4%, frente a 3% que se expandió el PBI, y pese a que se usaron más de 6.000 millones de reservas del Banco Central para cancelar vencimientos y se licuó el equivalente a 14.000 millones de dólares de compromisos nominados en pesos con la devaluación del peso.

Como conclusión final del encuentro, Economía comunicó que «los ministros y gobernadores del G20, que representan el 85% del PBI mundial, resaltaron que pese a las mejoras recientes en las perspectivas económicas globales, aún permanecen riesgos y vulnerabilidades. El G20 reafirmó así el compromiso de realizar políticas concretas para impulsar el crecimiento global a través de la creación de empleo y en un marco de estabilidad financiera mundial. En ese sentido, se reconoció el papel fundamental que juega la inversión, particularmente en infraestructura, para lograr los mencionados objetivos».

En la sesión de trabajo también estuvieron presentes la embajadora de la Argentina en los Estados Unidos, Cecilia Nahón, y los directores del Banco Central, Carlos Belmonte y Eduardo Barbier.
infobae.com

Confirmada la caída del empleo: 4.758 despidos y 7.246 suspensiones en febrero

2014 iba a ser el año del regreso del desempleo, se sabía desde el año pasado debido al parate en la actividad y el freno en la creación de puestos de trabajo. Para empeorar las cosas, en enero y febrero, la aceleración de la inflación está poniendo fin a un ciclo de expansión basado en el estímulo al consumo cuyo final es estancamiento del empleo y aumentos de salarios que no compensan la inflación. Consultoras, bancos y cámaras comerciales coincidían semanas atrás en proyectar que este año no sólo continuaría el freno en la creación de empleos sino que también habría un aumento de la desocupación. Ahora un estudio de la consultora Tendencias Económicas determinó que en febrero hubo 4.758 despidos, 18 veces más que en el mismo mes de 2013 y 7.246 suspensiones.
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).- A fines de febrero en Urgente24 advertimos que las consultoras, bancos y cámaras comerciales coincidían en proyectar que este año no sólo continuaría el freno en la creación de empleos sino que también habría un aumento de la desocupación. LatinFocus Consensus Forecast reunió las estimaciones que coinciden que el desempleo aumentará a 8% para este año y 8,3% en 2015 según el promedio de los consultados. Antes, la OIT y un reporte de Idesa también coincidieron en la pérdida de empleos y la caída en la generación de puestos en 2013.

La caída en la tasa de desempleo que informó el INdEC en febrero se produjo porque mucha gente dejó de buscar trabajo. Esto es el resultado de la pérdida de capacidad para generar nuevos empleos asociada al bajo crecimiento económico y la pobre calidad de las instituciones laborales.

En ese marco, y con el enfriamiento de la economía y la incertidumbre, este martes 18/03 otro estudio privado confirma que cayó sensiblemente el interés del sector privado en incorporar personal, pero lo más grave es que aumentaron los despidos y las suspensiones.

La consultora a cargo del estudio Tendencias Económicas determinó que (sobre la base de información oficial y denuncias sindicales), en febrero hubo 4.758 despidos, 18 veces más que en el mismo mes de 2013, siendo los sectores de autopartes, construcción y comunicaciones, los más afectados.

«Era lo que se veía venir en las últimas semanas y se explica por la menor actividad económica y las restricciones a las importaciones», evaluó el director de la consultora, José Luis Blanco.

A su vez, el mes pasado también se contabilizaron 7.246 suspensiones, 2,5 veces más que en el mismo mes de 2013, y se concentraron, principalmente, en el sector automotor, afectado por una caída en la demanda y también por problemas para acceder a sus insumos para la producción.

Algunas de las suspensiones se deben al conflicto sindical con el fabricante de faros Valeo, donde, según el informe de Tendencias Económicas que publica el diario La Nación, hubo 45 despidos en febrero.

Advierten una caída del empleo por el ajuste fiscal

empleo
Tras la crisis económica en el país, que se refleja en la inflación, y en la negativa del Estado a realizar aumentos salariales acordes a la canasta familiar, economistas prevén más consecuencias en relación a la desaceleración del empleo.

Los analistas pronostican que debido a la crisis fiscal, el ajuste se trasladará al mundo laboral. Así prevén que aumentará el desempleo, y posiblemente también serán más aquellos que no estudian ni trabajan tras quedar afuera de un mercado laboral restringido.

El kirchnerismo había generado desde el 2007 una inmensa cantidad de empleo en el Estado (provincial, nacional y municipal, respectivamente), justo cuando el empleo privado comenzaba a desacelerar. El empleo público representa alrededor del 22% de la ocupación total.

Desde el año pasado ya comenzó a producirse una desaceleración del empleo público. Se trata de que está creciendo a niveles más bajos que en su auge. Estiman que el crecimiento estimado para el año pasado fue de 3,1%, cuando en los últimos años había sido de 4,4%.

Según el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) en 2011 el Estado creó 82.000 puestos de trabajo, mientras que en 2013 generó casi la mitad (unos 42.000 trabajos).

El enfriamiento de la economía tiene sus vertientes. Se observa que el gobierno no quiere aumentar el salario, que baje el consumo, frenar la crisis fiscal mediante restricciones y tensiones cambiarias.

Finalmente en la actualidad comenzarán a observarse una gran masa de empleados públicos con salarios relativamente bajos, tal como sucedió con la crisis policial y acuartelamiento en Diciembre.
diariohoy.net

Amplían el seguro de empleo a afectados por inundaciones del 1 y 2 de abril

inundadosSegún la Resolución 375 publicada en el Boletín Oficial, las personas afectadas tendrán plazo para realizar su adhesión al seguro hasta el 31 de julio de 2013. Consiste en un aporte de $200 por mes

Así lo estableció el Ministerio de Trabajo. La cobertura del Seguro de Capacitación y Empleo se amplío a personas en situación de desempleo afectadas por las inundaciones del 1 y 2 de abril.

Asimismo, los participantes del seguro que residan en las zonas afectadas y su adhesión venza o haya vencido con anterioridad al 1 de agosto de 2013, podrán solicitar la extensión de la vigencia de su adhesión por un plazo de seis meses.

Las solicitudes se realizan ante la Gerencia de Empleo y Capacitación Laboral, correspondiente a su domicilio, a través del Formulario de Solicitud de Extensión.

A través de este Seguro, se otorgarán $200 mensuales a trabajadoras y trabajadores desocupados, además del reconocimiento a los fines previsionales del tiempo de permanencia en el mismo y acciones de formación profesional, de certificación de estudios formales y apoyo a la inserción laboral.

Paliativo económico

«Las fuertes tormentas ocurridas los días 1° y 2 de abril de 2013 han tenido como consecuencia las inundaciones acaecidas en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en diversas localidades del Conurbano Bonaerense y en la Ciudad de La Plata, generando todo tipo de daños de gravedad y el fallecimiento de numerosas personas», indicó la normativa.

Por ello, se consideró «pertinente ofrecer a las personas damnificadas por las inundaciones, que se encuentren en situación de desempleo, la posibilidad de acceder a las prestaciones del Seguro de Capacitación y Empleo».

Fuente: Infobae

Los argentinos le dan importancia al empleo a largo plazo

Los trabajadores argentinos se diferencian de los de otros países por la importancia que le dan al empleo de largo plazo, frente a otras economías donde los empleados ven a la migración de empresa como una factor de crecimiento..

«Los argentinos nos queremos quedar a largo plazo en una empresa, hacer carrera en ella», señaló la directora ejecutiva de la consultora Randstad, Andrea Avila, al presentar los resultados de un informe sobre el trabajador argentino, el primero en su tipo a nivel regional que se suma a los países investigados por la empresa.

Avila aclaró que los «trabajadores más jóvenes buscan que la empresa en la que trabajen tenga oportunidades internacionales» pero insistió en que «el desarrollo a largo plazo es una necesidad más argentina».

De hecho el 42% de los encuestados negaron estar pensado en una cambio de empresa en los próximos dos años, mientras que un 16% no lo sabe, un 28% consideró que probablemente lo pensaría y sólo un 16% respondió que definitivamente está pensando en cambiar de empleo.

La entrega de los premios a las empresas más elegidas por los encuestados, fue el escenario para comentar también los resultados del informe en el que participaron más de 7.000 individuos.

El salario es el principal factor para elegir una compañía dónde trabajar, al igual que en otras economías, mientras que en la Argentina la seguridad laboral a largo plazo aparece en el segundo puesto con apenas cinco puntos de diferencia con el primero.

El tercer lugar lo ocupa la cultura del trabajo con 7 puntos de diferencia respecto del salario; en cuarto puesto los argentinos ubicaron a las oportunidades de crecimiento profesional con 24 puntos de diferencia y en quinto lugar la flexibilidad en el trabajo con 26 puntos de diferencia respecto del primer factor.

Al segmentar por género, los hombres «prefieren con mayor frecuencia empresas saneadas a nivel financiero, que ofrezcan oportunidades profesionales internacionales y utilizan las últimas tecnologías».

Mientras que las mujeres trabajadoras argentinas priorizan «convenios de trabajo más flexibles, fuerte cultura laboral y gestión de la diversidad».

Otra segmentación es la que realizaron entre los trabajadores de oficina y los del área de producción, ya que la visión de la empresa ideal difiere entre uno y otro.

«En general los trabajadores de oficinas y de entidades sin fines de lucro priorizan la seguridad laboral a largo plazo y la fuerte cultura de trabajo como las razones para no abandonar al actual empleador», cita el informe.

Mientras que los encuestados del área de producción tienen como principal factor para quedarse en la misma empresa el saneamiento financiero.

YPF y Volkswagen lideran el ranking de empresas con mayor atractivo absoluto, es decir las más elegidas para trabajar entre el total de la muestra, con un 44% de respuestas positivas cada una.

Seguidas por las firmas privadas La Serenísima, Arcor, Ford, Toyota, Mercedes Benz, Renault, Sancor y en el décimo lugar el Banco Nación con 39% de respuestas positivas.

No obstante al filtrar las respuesta a los encuestados que conocen la empresa, más allá de la recordación de marca, el podio es ocupado por Mercedes Benz, Volkswagen e IBM.

Los tres sectores con mayor puntuación entre los trabajadores argentinos fueron las industrias de software, de químicos, papel y caucho y la automotriz.

Según la consultora el atractivo de la automotriz está determinado «fundamentalmente por el salario, aprendizaje y liderazgo», mientras que el software por las «perspectivas profesionales».

El sector de químicos, papel y caucho «es el más atractivo en muchos aspectos» pero el factor más destacado es la preocupación por el medio ambiente, seguida por aprendizaje y desarrollo.
telam.com.ar

Chile creció 5,6% en 2012 y se acerca al pleno empleo

La expansión, situada por sobre el promedio latinoamericano, se vio empujada por un alza de la demanda interna y la inversión.
La economía chilena creció un 5,6% en 2012, en medio de un descenso del desempleo y la inflación, informó hoy el Banco Central autónomo.

La expansión económica, situada por sobre el promedio latinoamericano, se vio empujada por un alza de la demanda interna y la inversión, informa DPA.de

Las perspectivas para 2013, año marcado por las elecciones presidenciales de noviembre, apuntan a un aumento del producto interior bruto (PIB) de un cinco por ciento. La inflación interanual suma sólo un 1,3 por ciento.

El desempleo, si persiste el crecimiento durante el actual año, bajaría del 6,0 por ciento actual, llegando a niveles de plena ocupación.

Las cifras macroeconómicas, acompañadas por un bajo endeudamiento público, contrastan con magros resultados en distribución del ingreso.

En Chile, país que está cerca de alcanzar un producto per cápita por paridad de compra de 20.000 dólares, la mitad de la población percibe 3.000 dólares per cápita, cifra similar a países como Congo.
mdzol.com

Confirmado: Se complica el empleo y aumentan los desocupados y subocupados


Uno de los pilares del ‘modelo’ y del ‘relato’ hace agua y el Gobierno nacional ya no puede ocultarlo. Quizás previendo que tarde o temprano tendría que reconocerlo, el 04/08 el ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, dijo que a pesar de que el Gobierno nacional se está “anticipando con políticas anticíclicas”, se frenaron las contrataciones de empleados pero el Indec no solo confirma los dichos del funcionario –que coincide con varias estimaciones privadas- sino que acusa la destrucción de puestos de trabajo.

“Se detuvieron las incorporaciones, y eso es un síntoma de que hay que empezar a cuidar el empleo“.

La caída en la inversión y el estancamiento de la actividad, el menor uso de la capacidad instalada en la industria y la mayor cantidad de suspensiones y despidos, configura en el mejor de los escenarios un freno en la incorporación de trabajadores (puede incluso haber reducción de la cantidad de ocupados).

Este martes (21/08) se conoció que la tasa de desempleo en el segundo trimestre del año se ubicó en 7,2 por ciento y tuvo una leve baja de 0,1 puntos respecto al mismo período del año pasado, en tanto que la subocupación fue de 9,4 por ciento y subió un punto respecto al segundo trimestre de 2011 cuando había sido de 8,4 por ciento.

En consecuencia, para el INDEC el estancamiento de la economía en el período afectó a aquellos trabajadores que no llegan a trabajar más de 35 horas por semana y están dispuestos a trabajar más horas.

Aunque en su informe de nivel de actividad difundido la semana pasada, el INDEC suministró datos que permiten inferir que entre abril y junio de este año la economía tuvo los mismos parámetros que en el mismo período de 2011.

Por eso esperaba un impacto en la tasa de desempleo, pero la información oficial precisó que el escenario de estancamiento afectó más a aquellos trabajadores que ya venían con problemas de inserción laboral.

No obstante, a partir de los números oficiales se infiere que la crisis impactó a cerca de 400 mil trabajadores, precarizando aún más su situación.
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).-

Freno en la creación de empleo

El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, reconoció que como consecuencia de la crisis económico global, en la Argentina «se detuvieron las incorporaciones y eso es un síntoma de que hay que empezar a cuidar el empleo».
Con bastante demora, el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, reconoció ayer que, como consecuencia de la crisis global, en la Argentina “se detuvieron las incorporaciones, y eso es un síntoma de que hay que empezar a cuidar el empleo” . Y agregó, en declaraciones al diario oficialista Página 12 , que con las políticas que está aplicando el Gobierno se “van a generar muchos puestos de trabajo”. Las palabras de Tomada confirman lo que viene informando Clarín y desmienten al INDEC que, tan sólo dos semanas atrás, informó que en el segundo trimestre de este año las empresas tomaron más gente y el empleo industrial aumentó 1,7%. Esa creación de empleos equivaldría a unos 20.000 puestos de trabajo industriales nuevos, según publicó el diario La Nación.

Esa estadística del INDEC llamó la atención — y así lo consignó este diario— porque al mismo tiempo el organismo estadístico había reconocido una caída del 3,3% en la actividad industrial, un menor uso de la capacidad instalada y una baja de 1,7% en el índice de horas trabajadas.

Ayer, la consultora Tendencias Económicas informó que desde comienzos del año viene subiendo la “conflictividad laboral” que se manifiesta en el mayor número de paros, despidos y suspensiones “en un contexto de caída de la actividad económica total”.

Ya el Ministerio de Trabajo, a través de sus encuestas entre las empresas, había detectado que la creación de empleo nuevo se detuvo a fines del año pasado . Y que en marzo de este año el empleo se ubicó al nivel de octubre de 2011. Así el parate en la toma de personal nuevo se remonta a nueve meses atrás.

A su vez, en el primer trimestre de este año, se perdieron 11.777 empleos formales en la construcción, una caída del 2,7%. Además, en junio, la superficie a construir se redujo un 14,1% respecto de un año atrás.

Hasta julio, la producción automotriz cayó un 15%. Y la oficialista CAME reconoció que en julio las ventas minoristas cayeron 6,3%, lo que representó el quinto mes consecutivo de caída del consumo minorista (ver en esta misma página). Por su parte, los empresarios de la industria y la construcción -con 1,7 millón de empleos formales- admiten que hubo una reducción generalizada de horas extras y suspensiones parciales , e incluso que están haciendo malabarismos para mantener el personal.

Por ese motivo, volvieron a crecer los pedidos de REPRO (Programa de Recuperación Productiva), la ayuda que otorga el Ministerio de Trabajo a las empresas que suspenden personal. Para acceder las empresas deben acreditar que están en situación de crisis. En ese caso Trabajo otorga hasta $ 800 mensuales por trabajador.
lapoliticaonline.com

En un escenario conflictivo, el empleo cae por primera vez en 10 años

Las últimas medidas de la administración de Cristina Fernández, como las restricciones aplicadas a las importaciones, el cepo a la compra de dólares y el acortamiento de plazos para liquidar exportaciones, golpearon fuerte sobre el nivel de actividad, con efectos directos sobre el nivel de empleo que, según diversas estimaciones privadas, registró la primera caída en 10 años.

A la par del proceso de desaceleración de la economía y frente a señales políticas que elevan el clima de conflictividad social, el deterioro del mercado de trabajo se profundizó en los últimos meses en una dinámica que amenaza derivar en un escenario laboral aún más complicado que el que emergió en medio de los coletazos de la crisis financiera de 2009. Las últimas medidas de la administración de Cristina Fernández, como las restricciones aplicadas a las importaciones, el cepo a la compra de dólares y el acortamiento de plazos para liquidar exportaciones, golpearon fuerte sobre el nivel de actividad, con efectos directos sobre el nivel de empleo que, según diversas estimaciones privadas, registró la primera caída en 10 años.

El freno de la economía impactó de lleno sobre los planes de contratación de las empresas, que se paralizaron durante el segundo trimestre del año, mientras crecieron con fuerza otros mecanismos de ajuste del mercado laboral, como la cantidad de suspensiones, recorte de horas extras, adelantos de vacaciones y vacantes no cubiertas.

por Cronista.com

2012 frena el empleo (y ahora el consumo pende de las Paritarias)

CON LA INVERSIÓN ESTANCADA Y LA DESACELERACIÓN GENERAL – El comienzo de este año hace temblar la dinámica del mercado laboral para 2012: entre enero y abril se incrementó tanto la cantidad de despidos como la de suspensiones de personal como no sucedía desde 2009. Se redujeron las horas trabajadas y el número de obreros ocupados. El Índice de Demanda Laboral acumula una merma de 23%, y el menor ritmo de expansión de la actividad económica sumado al freno en la inversión, clave para sostener en el tiempo la creación neta de empleo, hacen poco probable que el desempleo se reduzca en 2012.

Así, el «combustible» del consumo dependerá de las paritarias que aún se llevan a cabo. Y con expectativas de inflación en 30%, los acuerdos salariales inferiores a 20% están prácticamente descartados.

El 2012 será un año duro para el mercado laboral.

VALOR AGREGADO

Para Cristina, será una semana complicada…
Peor que en los años ’90
La otra cuestión: Paritarias

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Ecolatina) El 2011 fue un buen año para el mercado laboral. No sólo se caracterizó por un nuevo incremento de la ocupación total (+2,6% i.a.) sino también por un importante crecimiento de los puestos de trabajo asalariado formales, que aumentaron 4,6% anual, por encima de la creación de empleo registrado de 2010 (+3,2% anual). En consecuencia, la tasa de informalidad volvió a reducirse el año pasado, ubicándose en 34,3% frente al 35,2% de 2010.

Sin embargo, el arranque de este año prefigura que la dinámica del mercado laboral no será favorable como 2011. De hecho, los primeros indicadores relacionados al mercado de trabajo no son muy alentadores.

Por caso, entre enero y abril de 2012 se incrementó tanto la cantidad de despidos con respecto al mismo período de 2011 como la de suspensiones de personal. Así, por primera vez desde inicios del 2009 aumentaron en un mismo cuatrimestre los despidos y las suspensiones (en comparación interanual).

En la misma línea, se observó en la industria una reducción de las horas trabajadas por obrero en los primeros meses del año, lo que ya había ocurrido en el último trimestre de 2011. Esto podría ser un indicio de que los trabajadores estarían realizando menos horas extra.

La cantidad de horas trabajadas suele anticipar el ciclo económico en mayor medida que el número de obreros ocupados. Es decir, luego de una crisis los empresarios tienden a incrementar primero la jornada laboral de sus empleados hasta verificar la fortaleza de la recuperación, para luego reemplazar esas horas extra por nueva dotación de empleo. En cambio, si se vislumbran síntomas de estancamiento de la actividad, las horas trabajadas suelen resentirse antes que el número de ocupados.

En números, los datos de INDEC muestran la cantidad de horas trabajadas en la industria durante los primeros tres meses de 2012 creció a un menor ritmo que la cantidad de obreros ocupados (1,6% i.a. vs. 2,4% i.a.), lo que implica que en promedio las horas trabajados por empleado fueron menores que en enero-marzo de 2011.

Además, desde el tercer trimestre del año pasado se observa una desaceleración simultánea en el ritmo de expansión de las horas trabajadas y de los obreros ocupados, algo que no ocurría desde el segundo trimestre de 2008.

Más allá de estos primeros datos “duros”, los indicadores líderes también vaticinan complicaciones en los meses venideros.

El Índice de Demanda Laboral elaborado por la Universidad Torcuato Di Tella acumula en los primeros cuatro meses del año una merma de 23% (sin estacionalidad) en el Gran Buenos Aires, el aglomerado urbano con la mayor cantidad de trabajadores del país. Este indicador, que viene cediendo terreno desde fines de 2011, mostró en abril la mayor caída (-36% i.a.) desde la crisis financiera internacional (2008-09), y alcanzó el menor nivel desde 2002.

En la misma dirección se inscribe la encuesta de perspectivas laborales elaborada por Manpower, donde la expectativa neta de empleo para el segundo trimestre de 2012 –es decir, el diferencial entre el porcentaje de empresas que esperan aumentar su dotación de trabajadores y los que estiman reducirla– se mantuvo en 14% en términos desestacionalizados, 7 p.p. por debajo de las perspectivas para el segundo trimestre del año pasado.

Así, y a pesar de que por el momento no se dieron a conocer cifras oficiales acerca del desempeño de la ocupación en los primeros meses de 2012, estimamos que incluso la cantidad de puestos de trabajo formales ya estaría mostrando una importante desaceleración (prevemos un crecimiento de la ocupación formal por debajo del 2% i.a. en enero-marzo).

Con menor creación de empleo, el consumo dependerá de las paritarias

Los primeros datos del mercado laboral no están desligados de la moderación que se observa en la actividad económica. De hecho, según datos oficiales, en el primer bimestre la actividad económica no creció en términos desestacionalizados (s.e.), mientras que la industria verificó en los primeros tres meses del año un retroceso de 0,7% con relación al último trimestre de 2011 (s.e.).

Más importante aún, buena parte del freno estaría concentrado en la inversión. Cabe recordar que la inversión interna bruta fija se compone de construcción y equipo durable de producción (EDP), dos de los rubros más resentidos en el arranque del año.

En el primer caso, tanto los despachos de cemento como el índice Construya, que releva la venta de insumos de las principales empresas del sector, indican que la actividad de la construcción no tuvo un buen arranque. En cifras, los despachos de cemento cayeron 4,6% i.a. en los primeros cuatro meses del año al tiempo que el Índice Construya mostró un retroceso de 1% i.a.
En cuanto a los bienes durables, las cantidades importadas de bienes de capital cayeron 12% i.a. en el primer trimestre. Cabe recordar que en las Cuentas Nacionales el equipo importado representa un 60% del EDP total, y una cuarta parte de la inversión total.

La inversión no sólo es clave para incrementar la capacidad futura de producción sino también para sostener en el tiempo la creación de empleo. De hecho, para el período 2003-2011 el empleo muestra una correlación más elevada con la inversión que con la actividad económica en general (75% vs. 52% respectivamente).

En este sentido, el estancamiento de la inversión en los primeros meses permite prefigurar un año difícil para la generación de empleo, que difícilmente supere el ingreso de nuevos trabajadores al mercado laboral. De esta manera, prevemos que en 2012 el desempleo no mejorará e incluso podría, por primera vez desde 2009, mostrar una leve suba.

Por una baja creación de nuevos puestos de trabajo y una reducción de horas por trabajador, el “combustible” del consumo dependerá casi exclusivamente de las negociaciones salariales que aún se están llevando a cabo.

Con expectativas de inflación crecientes –en marzo y abril se ubicaron en 30%, rompiendo un año de estabilidad– acuerdos salariales por debajo de 20% están prácticamente descartados. Esto es favorable para reanimar al consumo, pero cabe recordar que una fuerte suba de los costos salariales en un contexto de moderación económica, implica un nuevo condicionante para la generación de empleo.

En este sentido, a diferencia de otros años, la performance de la masa salarial estará apuntalada casi exclusivamente por los aumentos salariales ya que la creación de empleo será escasa. En este contexto será muy difícil repetir el crecimiento nominal de la masa salarial exhibido en 2011 (en torno de 32% i.a.).

En síntesis, las perspectivas de empleo para 2012 no son tan alentadoras. Si bien las mejoras observadas en los últimos años han sido fenomenales, hacia adelante habrá que apuntalar la inversión para atacar los problemas pendientes del mercado laboral (subocupación, empleo no registrado, etc.).

Aumentó el empleo en negro y afecta a 4,2 millones de personas

Alcanzó al 34,2% en el cuarto trimestre de 2011, frente al 33,7% registrado un año atrás.
Alcanzó al 34,2% en el cuarto trimestre de 2011, frente al 33,7% registrado un año atrás.
El porcentaje de trabajadores informales o «en negro» subió a 34,2 por ciento en el cuarto trimestre de 2011 y afecta a cerca de 4,2 millones de empleados, según los datos que difundió ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

En el ultimo trimestre de 2010, el 33,7 por ciento de la fuerza laboral no contaba con descuentos jubilatorios y sociales, con lo cual al cuarto trimestre de 2011 el porcentaje se elevó en medio punto.

Traducido en cifras, más de 440 mil personas más se vieron afectadas por una relación laboral irregular durante el año pasado.

De acuerdo con los datos oficiales sobre una Población Económicamente Activa (PEA) de 17 millones de personas y con una desocupación de 6,3 por ciento, la cantidad de trabajadores totales se ubica en 15.861.000 personas.
lanacion.com

En Argentina hay 2,1 millones de personas que buscan empleo y no encuentran

Esa cantidad de personas que buscan empleo por necesidad resultó, en el último trimestre de 2011, muy similar a la de fines de 2010 y también de 2009, según puede estimarse a partir de los datos difundidos por el Indec.

En la población urbana del país hay 2,12 millones de personas que están en la búsqueda de un empleo, ya sea porque están desocupados (es el caso de 1,13 millones) o porque su puesto es de pocas horas y entonces, por la insuficiencia de ingresos, demandan algo mejor (son 990.000 las personas en esta situación).

Esa cantidad de personas que buscan empleo por necesidad resultó, en el último trimestre de 2011, muy similar a la de fines de 2010 y también de 2009, según puede estimarse a partir de los datos difundidos por el Indec y provenientes de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), destaca hoy el diario La Nación.

Si bien disminuyó el índice de desocupación -en el término de un año pasó de 7,3 al 6,7% de la población activa-, por el otro lado aumentó la proporción de subocupados que dicen estar buscando activamente un puesto, del 5,5 al 5,9%. Eso explica que no haya variado la cantidad de demandantes de puestos.
por La Nación

El desempleo cayó al 7,2 por ciento en el tercer trimestre del año

El desempleo retrocedió hasta el 7,2 por ciento durante el tercer trimestre del corriente año, contra el 7,5 por ciento de igual período de 2010, informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

En tanto, respecto al segundo trimestre del corriente año, la desocupación bajó una décima entre el período comprendido por los meses de julio-agosto-septiembre, según los resultados de la Encuestas Permanente de Hogares (EPH).

La caída del desempleo registrada durante el tercer trimestre del año fue adelantada el 19 de octubre pasado por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, durante el acto de cierre de la campaña electoral.

«La tasa de desempleo cayó del 7,3% del trimestre anterior al 7,2% en en el presente trimestre», reveló en esa oportunidad la Presidenta.

Con el retroceso hasta el 7,2 por ciento, la tasa de desocupación se mantiene por debajo del 10 por ciento por veinte trimestres consecutivos.

El informe del INDEC detalla además, que en el tercer trimestre, para el total de los 31 aglomerados urbanos, la tasa de actividad fue del 46,7% (contra 45,9% de igual período anterior); y la tasa de empleo del 43,4% (42,5%).

En tanto la tasa de subocupación fue del 8,8% (demandante 6,0% y no demandante 2,8%).
Fuente: diariohoy.net