Fornasari, que estaba de licencia, alegó un tema de salud, pero reconoció que su salida podría “facilitar el camino de la solución”.
La crisis del Colegio Carlos Pellegrini, que se encuentra tomado por los alumnos, sumó un nuevo capítulo. Un día después de que la UBA decidiera extender el ciclo lectivo para recuperar 15 días, el rector de la escuela, Jorge Fornasari, presentó ayer la renuncia esgrimiendo problemas de salud, aunque admitió que su salida tiene como propósito “facilitar el camino de la solución” al conflicto. Desde la Asociación Gremial Docente, que apoya la toma, retrucaron que “lo que correspondería es que todo el equipo (por las autoridades) renuncie”.
“Mi compromiso y trayectoria profesional y personal con la institución, con la que me siento plenamente identificado, hacen necesaria esta decisión personal en el convencimiento, a su vez, de facilitar el camino hacia una solución responsable de los problemas que son de público conocimiento”, anunció su salida Fornasari, que actualmente estaba de licencia, en una carta dirigida al rector de la UBA, Rubén Hallú. Duró en el cargo escasos cinco meses. Por el momento, hasta tanto se designe una nueva autoridad, seguirá al mando el vicerrector Juárez Roca.
La noticia tuvo rebote en la AGD, el gremio que protesta junto a los alumnos y que pide la renuncia de la cúpula de directivos. “La renuncia de Fornasari no resuelve la crisis en tanto no se designen nuevas autoridades. Lo que correspondería es que todo el equipo renuncie”, aclaró el profesor Julio Bulacio.
El conflicto en el colegio comenzó hace más de dos meses, cuando los alumnos del Centro de Estudiantes y el gremio de la AGD cuestionaron la designación “a dedo” de los docentes. Desde esa fecha, hubo marchas, abrazos simbólicos y tomas.
Fuente: LA Razón